martes, 23 de octubre de 2007

Hoy, ahora, la melancolía.

He estado revisando aquella vieja y rota cartera de papá. Hoy me faltan todos y estoy muy sola. Hoy, ahora, mi corazón sangra por los que ya no están, por los que se fueron y no consigo olvidar, por todos aquellos que en algún momento ocuparon una parte muy importante en mi corazón.
Hoy, ahora, la melancolía y la morriña me invaden.
Pero tengo que seguir con mis otros, tengo que ocuparme de ellos y darles de comer, mientras hoy mi corazón no está más que para llorar.

3 comentarios:

ricardo dijo...

...deixo-te um beijo...
:*

Cachito dijo...

Hoy hablaba con mamá sobre ir o no a Lora para llevar flores al cementerio. Le preguntaba: "¿para qué? ¿para que la gente SEPA que nos acordamos de papá?"
No pasa ni un solo día que no piense en él. Por un motivo u otro. Sin necesidad de flores.

fonsilleda dijo...

Es cierto, no se necesita una sepultura para que el corazón, a veces, duela por ellos